Volodímir Zelenski ha insistido este viernes en una conversación telefónica con Donald Trump en la necesidad de que Estados Unidos aporte recursos de defensa antiaérea para Ucrania. Zelenski, presidente del país invadido por Rusia, ha hablado con su homólogo estadounidense el mismo día en el que el ejército ruso ha llevado a cabo uno de los bombardeos más intensos sobre Kiev en los más de tres años que dura la guerra. “Hemos acordado que trabajaremos para incrementar la protección en el cielo. Hemos acordado que nuestros equipos se reunirán”, ha comunicado Zelenski en sus redes sociales.
La entrevista se produce dos días después de que el Pentágono anunciara la suspensión de la entrega de armamento clave para la resistencia ucrania. La Casa Blanca frenó en junio el envío de 20.000 misiles antidrones, acordados por el expresidente Joe Biden al final de su mandato, para transferirlos a la protección de Israel y de sus bases en Oriente Próximo. El martes se supo que también se había suspendido la entrega a Ucrania de misiles antiaéreos Patriot, cohetes antiaéreos Stinger, munición de artillería y misiles de precisión, entre otros. El daño de esta decisión para los intereses ucranios es particularmente elevado en cuanto a la protección ante los bombardeos de largo alcance rusos.
Zelenski ya consiguió un compromiso de buenas intenciones de Trump en la cumbre de la OTAN del pasado junio. El líder ucranio llegó a la cita de la Alianza Atlántica con una propuesta para el presidente estadounidense: Ucrania está dispuesta a lo que sea necesario, incluso a comprar el armamento. La adquisición sería con la financiación de sus aliados europeos. Trump afirmó que tratarían de encontrar una solución, sobre todo en lo que concierne a los sistemas antiaéreos Patriot, que son el pilar de la protección ucrania contra los misiles rusos.
Trump ha asegurado en numerosas ocasiones, incluso desde antes de iniciar su mandato el pasado enero, que él no seguiría la política de su antecesor: la prioridad para el nuevo inquilino de la Casa Blanca ha sido cortar el grifo de la asistencia militar para Ucrania. Lo que no estaba en el guion es que también suspendería las últimas partidas aprobadas por Biden y pendientes de ser entregadas.
Trump afirmó el jueves que los arsenales estadounidenses están bajo mínimos porque Biden fue demasiado generoso con Ucrania: “Biden dejó al país sin nada para dárselo [a los ucranios], y debemos que asegurarnos que tenemos para nosotros mismos”.
El mandatario estadounidense realizó estas declaraciones tras entrevistarse telefónicamente con Vladímir Putin. Trump confirmó que el presidente ruso le había manifestado su intención de continuar la guerra. Trump, por lo habitual conciliador y comprensivo con Putin, convencido de que su homólogo ruso quiere la paz, admitió que la conversación fue “muy mal”: “Estoy muy decepcionado con la conversación con Putin. Sinceramente, me parece que Putin ya no está [dispuesto a negociar la paz]. Estoy muy decepcionado porque no creo que quiera parar, y eso es muy malo”.
Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, ha precisado este viernes que los objetivos que persigue Rusia —la anexión total y el reconocimiento de las provincias ocupadas, en otros— no solo tienen por qué conseguirse militarmente. “Sería preferible alcanzarlos por la vía política y diplomática”, ha dicho Peskov.
EE UU forzó en mayo la apertura de la vía diplomática entre Ucrania y Rusia con el objetivo de que ambos contendientes sellaran un alto el fuego sin condiciones. Ucrania lo aceptó, tras múltiples amenazas de Trump —entre ellas, suspender la asistencia militar—, pero no así Rusia. “Hemos hecho mucho con América y hemos apoyado todos los esfuerzos para detener las muertes y recuperar una paz normal, estable, digna”, ha afirmado Zelenski: “Un acuerdo decente es necesario para alcanzar la paz y por eso apoyamos las propuestas americanas”.
Tanto Zelenski como el jefe de la oficina de la presidencia ucrania, Andri Yermak, se han deshecho en elogios hacia Trump, expresando en varias ocasiones su agradecimiento. Esto es así desde la sonada discusión que mantuvieron Zelenski, Trump y su vicepresidente, J. D. Vance, el pasado febrero en la Casa Blanca. Vance afeó en aquella pelea al mandatario ucranio que no agradecería lo suficiente el apoyo estadounidense. Desde entonces, cada mensaje público de Kiev incluye agradecimientos para Trump.
“Los pueblos americanos y ucranio tienen un vínculo especial, una historia especial. Y siempre estaremos agradecidos a EE UU por todo lo que han hecho por nosotros”, ha afirmado Yermak. “Damos las gracias al presidente Trump por su honestidad y por ser directo, como un swing de golf perfecto”, ha añadido la mano derecha de Zelenski.
La razón de este discurso adulador no es otra que la dependencia ucrania de la ayuda estadounidense, que hasta este año representaba cerca de un tercio del arsenal ucranio, siendo especialmente imprescindible en la defensa antiaérea. “No puedo imaginar y no quiero imaginar cómo vivir y cómo combatir sin la ayuda de EE UU”, reconoció Zelenski el 16 de junio.
El medio estadounidense Axios ha informado, a partir de fuentes anónimas, que Trump ha expresado a Zelenski su voluntad de ayudar en la protección aérea de Ucrania, también que evaluaría qué armamento ha sido suspendido. Kiev es consciente de que la palabra de Trump puede cambiar de un día para otro. Así fue el pasado 10 mayo, cuando los líderes de Alemania, el Reino Unido, Francia, Polonia y Ucrania, reunidos en Kiev, hablaron por teléfono con Trump y aseguraron de que el estadounidense había aceptado a aumentar las sanciones sobre Rusia si Putin no aceptaba el alto el fuego de forma inmediata.
Trump no se manifestó en este sentido en público y la Casa Blanca sigue sin aplicar nuevas sanciones sobre Rusia. Lo que Trump sí ha cumplido hasta ahora es su palabra de no aprobar nuevas partidas de ayuda militar para Ucrania.
