El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado a Europa con aranceles como respuesta a la multa multimillonaria impuesta por la Comisión Europea contra el gigante tecnológico Google por prácticas abusivas.
“Europa ha impuesto hoy un multa de 3.500 millones de dólares [2.950 millones de euros) a otra gran empresa estadounidense, Google, desfalcándola en la práctica para financiar inversiones y empleos estadounidenses. Esto se suma a las numerosas multas e impuestos contra Google y otras empresas tecnológicas”, ha reaccionado el republicano, primero mediante una de sus vías favoritas para expresar sus opiniones, las redes sociales, y pocos minutos después de viva voz, en declaraciones a la prensa desde el Despacho Oval durante una ceremonia de firma de órdenes ejecutivas.
En dos mensajes consecutivos en su red social, Truth, ha expresado que “¡es una injusticia que el contribuyente estadounidense no tolerará!”. “Como ya he dicho, mi Administración no permitirá que estas acciones discriminatorias se mantengan”, ha dicho, amagando con iniciar un procedimiento ante la oficina del representante comercial de Estados Unidos.
“No podemos dejar que esto le ocurra a (una muestra del) ingenio estadounidense brillante y sin precedentes”, insiste en su mensaje en redes sociales. “Si llega a ocurrir, me veré obligado a iniciar un procedimiento de la sección 301 [un artículo de la Ley de Comercio que permite al Gobierno tomar represalias comerciales contra países extranjeros que adopten prácticas comerciales consideradas injustas o discriminatorias] para anular las injustas sanciones impuestas a estas empresas estadounidenses contribuyentes”, ha subrayado.
En un segundo mensaje, el presidente estadounidense añade: “Google también ha pagado en el pasado 13.000 millones de dólares por acusaciones falsas y cargos por total de 16.500 millones de dólares ¿Qué locura es esta? ¡La Unión Europea debe acabar esta práctica contra las empresas estadounidenses!”
En sus declaraciones desde el Despacho Oval, Trump ha añadido que se pondrá en contacto con la UE para abordar el asunto. Para el estadounidense, la regulación europea del sector tecnológico es una de sus grandes fobias. Hace quince días ya había amenazado con imponer aranceles adicionales a las exportaciones europeas como represalia a las regulaciones digitales del bloque. “Los impuestos digitales, la legislación sobre servicios digitales y las regulaciones sobre mercados digitales están diseñados para perjudicar o discriminar a la tecnología estadounidense”, declaraba entonces.
Precisamente horas antes de que el bloque impusiera su multa, el presidente estadounidense había sido el anfitrión en una cena en la Casa Blanca con directivos de las grandes empresas tecnológicas estadounidenses, desde el fundador de Meta, Mark Zuckerberg, al consejero delegado de Google, Sunder Pichai, y la única notable ausencia de su antiguo gran aliado, Elon Musk.
La multa a Google por abuso de posición dominante en el mercado de la publicidad digital es la segunda más alta de la historia. La Comisión Europea ha dado al gigante tecnológico 60 días para que plantee medidas que remedien la situación.