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La Comisión Europea impuso el viernes una multa de 120 millones de euros a la red social X, antes conocida como Twitter, de Elon Musk, por primera vez en virtud de su histórica Ley de Servicios Digitales, tras una investigación de dos años.
En el centro de la investigación está la marca de verificación azul, que antes se utilizaba para señalar cuentas oficiales sin coste alguno, pero que ahora se vende por 7 euros al mes, y que corre el riesgo de confundir a los usuarios sobre la veracidad de las identidades.
Según la Comisión, con la nueva configuración de X, una cuenta con una marca de verificación puede no ser señal de un usuario real y ser, en cambio, un bot. Por ello, decidió imponer una sanción económica por infracción de las normas de la UE en materia de ASD.
En segundo lugar, la Comisión constató que X no cumplía la obligación de transparencia de la publicidad en la plataforma, desdibujando la línea entre publicidad y contenido que podría dar lugar a estafas financieras para los usuarios.
La Comisión argumentó que los usuarios y las autoridades no pueden acceder a un registro actualizado de anunciantes en el sitio, lo que también podría ser problemático durante las campañas electorales, ya que no está claro el origen de los reclamos.
X no ha explicado por qué algunos anuncios se dirigían a usuarios concretos. La Comisión también criticó a X por no facilitar a los investigadores datos sobre visitas y “me gusta”, a pesar de ser una obligación en virtud de la DSA.
El importe de la multa se basa en la “proporcionalidad”, según un funcionario de la Comisión. El total se basa en el cálculo de que la infracción de la marca azul debe multarse con 45 millones de euros, la violación del acceso a los datos por parte de los investigadores con 40 millones y la falta de acceso al registro de publicidad con 35 millones.
Aun así, la sanción de la Comisión está muy por debajo de la multa máxima del 6% que la AEPD puede imponer en función del volumen de negocios global total de X. En conjunto, la sanción es relativamente pequeña en comparación con multas anteriores contra otros gigantes tecnológicos estadounidenses, que dominan el mercado digital europeo.
En abril, en virtud de la ley antimonopolio de la UE sobre grandes tecnológicas, Apple y Meta fueron multadas con 500 y 200 millones de euros, respectivamente.
Investigación digital europea sobre el X de Musk
La investigación de la Comisión tardó dos años en decidirse a multar a X, un retraso criticado por varios gobiernos y por el excomisario Thierry Breton, que trabajó en el expediente bajo la primera Comisión de Von der Leyen.
Un funcionario de la UE declaró a ‘Euronews’ que el retraso se debió sobre todo al objetivo de la Comisión de construir un caso jurídico sólido, previendo que X probablemente interpondría una demanda para contrarrestar las conclusiones.
El vicepresidente estadounidense JD Vance publicó el jueves un mensaje en X en el que criticaba la decisión antes incluso de que se anunciara. “Hay rumores de que la Comisión Europea multará a X con cientos de millones de dólares por no ejercer la censura“, escribió.
“La UE debería apoyar la libertad de expresión, no atacar a las empresas estadounidenses por basura”, añadió. El pasado febrero, durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, Vance calificó a los comisarios europeos de “comisarios de la UE”, la policía política de los soviéticos.
Siguen en curso otras dos investigaciones contra X, una sobre cómo trata X los contenidos ilegales, cómo pueden señalarlos los usuarios y con qué eficacia los elimina la plataforma. Otra se centra en su algoritmo de recomendación, especialmente cuando se trata de radicalización del terrorismo y durante las campañas electorales.
El mismo día, la Comisión también anunció su satisfacción por el compromiso de TikTok en cuanto a estos depósitos de publicidad. El gigante chino de las plataformas de vídeo está siendo investigado desde principios de año y se ha comprometido a mejorar su sistema.
