Lifeway publicó un informe el martes basado en los hallazgos de un estudio de ex pastores de cuatro denominaciones protestantes diferentes, examinando por qué dejaron su vocación.
Según Lifeway, el 18% de los encuestados citó el conflicto en una iglesia como la razón para renunciar, mientras que otro 16% citó el “agotamiento” como la razón.
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La razón principal declarada fue un “cambio en el llamado”, con el 40% de los encuestados citando esto como la causa de su partida. Otras razones citadas incluyeron problemas familiares (10%), finanzas personales (10%), enfermedad (6%), no encajar bien con una iglesia (6%), problemas denominacionales (4%) y el cierre de la iglesia debido a los confinamientos por la COVID-19 (3%).
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Con respecto a aquellos que se fueron debido a un conflicto, el 45% de los encuestados reportó haber experimentado un conflicto significativo durante el último año que sirvieron como pastores.
Entre los ex pastores, el 87% enfrentó “conflictos en algún momento en su última congregación”, con el 56% experimentándolo por cambios propuestos y casi la mitad (49%) diciendo que experimentaron un “ataque personal significativo” como resultado.
Además, el 43% informó haber dejado sus puestos como pastores después de servir solo en una congregación, mientras que otro 43% informó haber servido como pastor principal durante 10 años o menos antes de irse.
Lifeway también informó que, a pesar de dejar el puesto de pastor, el 53% de los encuestados dijo que continúan trabajando en el ministerio, aunque en una capacidad diferente.
Los datos para el estudio se recopilaron a través de una encuesta en línea de 730 ex pastores realizada del 6 de mayo al 6 de julio. Las denominaciones representadas por la muestra incluyeron las Asambleas de Dios, la Iglesia del Nazareno, la Iglesia Wesleyana y la Convención Bautista del Sur.
Lifeway Research publicó un estudio similar en 2021, que encontró que el 32% de los ex pastores citaron un “cambio en el llamado” como su razón para irse, mientras que el 18% de los encuestados citó el conflicto en su iglesia y el 13% citó el agotamiento.
Aunque la mayoría del clero no decide renunciar antes de la edad de jubilación, muchos pastores han considerado seriamente hacerlo debido a varios factores, incluidos los desafíos recientes como pastorear una iglesia durante la pandemia de COVID-19 y los confinamientos persistentes.
Según un informe del Instituto Hartford para la Investigación de la Religión que se basó en datos recopilados en el otoño de 2023, el 53% del clero había considerado seriamente dejar su ministerio pastoral al menos una vez desde 2020.
